Ensayos de penetración dinámica: Qué son y para qué sirven

Ensayos de penetración dinámica

Dentro de los distintos tipos de pruebas geotécnicas que existen, los ensayos de penetración dinámica se constituyen como una prueba esencial para conocer ciertas características de un terreno.

En este artículo, vamos a detallar no sólo en qué consiste exactamente un ensayo de penetración dinámica, sino cuáles son los principales tipos de los mismos y para qué se utilizan.

Qué es un ensayo de penetración dinámica

Un ensayo de penetración dinámica es una forma de registro del terreno. Concretamente, son ensayos que realizan un registro continuo de la resistencia a la penetración, ofreciendo una medida continua desde la superficie a la profundidad máxima fijada en cada uno de ellos, o determinando aquella profundidad de rechazo a la que el terreno no permite seguir avanzando.

Con estos datos, se obtiene un reconocimiento geotécnico del terreno en superficie, dado información distinta al que ofrece un ensayo de penetración estándar, donde el sondeo se realiza sólo en el interior.

Clasificación de ensayos de penetración dinámica

En función del objetivo del estudio así como de las circunstancias del terreno, existen diferentes métodos de ensayos de penetración dinámica que se aplican en cada caso.

Ensayos DPSH

Los DPSH son el tipo de ensayo de penetración dinámica más utilizados tal y como establece el Código Técnico de Edificación. Sus siglas responden a Dynamic Probing Super Heavy, y es el tipo de estos ensayos que alcanza mayor profundidad y se realiza en terrenos de mayor resistencia.

Estos ensayos conllevan una serie de pasos:

  1. Se suelta en caída libre un peso de 63.5 kg a 76 cm de altura, concretamente, una puntaza circular que llega al suelo penetrando una varilla de acero y formando con la superficie del terreno un ángulo de 90 grados.
  2. Se mide cuántos golpes son necesarios para alcanzar una profundidad de 20 cm en el suelo.

Teniendo en cuenta estos pasos, el ensayo se termina cuando se llega a la profundidad establecida con un número determinado de golpes o cuando aparece el rechazo. Este se considera cuando se requieren 100 golpes o más. Asimismo, también se concluye el estudio cuando para lograr 3 tramos de 20cm se necesitan 75 golpes o más.

Ensayos DPH

Los ensayos de penetración dinámica DPH, se diferencian de los anteriores en el paso de siglas del estudio DPSH (Super Heavy) a PDH (heavy), lo que significa que la maza empleada es menos pesada. Concretamente, en este caso se usa un peso de 50 kg, y, en vez de a 76 cm, se coloca a 50 cm de altura.

Por otra parte, el objetivo tampoco es alcanzar los 20 cm, sino que se miden cuántos golpes de maza hacen falta para alcanzar los 10 cm de profundidad en el terreno. En este caso, el rechazo se alcanza con 1 medición superior a 100 golpes o 3 sucesivas de 75 o más.

Ensayos DPL

A diferencia de los anteriores, los ensayos de penetración dinámica DPL son los más ligeros. En este caso, el reconocimiento geotécnico se realiza a profundidades superficiales, de menos de 10 cm.

Se utilizan mazas de 10 kg que se liberan a 50 cm de altura en caída libre a través de la estructura de varillas metálicas.

Ensayos de penetración dinámica DPM

Entre los tipos de ensayos de penetración dinámica menos utilizados se encuentran los DPM. En este caso, como en el anterior, se miden los golpes necesarios para alcanzar los 10 cm de profundidad en un terreno pero con una maza de 30 kg que también se suelta a una altura de 50 cm.

Ensayos Borros

Por último, encontramos los llamados ensayos de penetración dinámica Borros. Este tipo de estudio es de los más utilizados para reconocimiento y caracterización geotécnica de un terreno, y posee características particulares respecto a los anteriores.

Si bien utiliza la maza más pesada de todas, de 65 kg, esta se suelta a una altura de 50 cm, como en los DPH. Además, también se diferencia por utilizar una puntaza de sección cuadrada, no circular, de punta cónica y posicionada con un ángulo de 60 grados.

Como en el DPSH, se contabilizan los golpes hasta penetrar 20 cm el terreno y el rechazo se alcanza en los 100 golpes.